Aguacato, Avocado, Aguacatero, Palta, Abacate, Abocado, Aguacatillo
1.
Descripción del aguacate:
Familia:
Lauráceas.
Especie: Persea
americana, Persea gratissima.
Origen:
México, y luego se difundió hasta las Antillas.
Árbol
extremadamente vigoroso (tronco potente con ramificaciones
vigorosas), pudiendo alcanzar hasta 30 m de altura.
Árbol
perennifolio.
Hojas
alternas, pedunculadas, muy brillantes.
Flores:
flores perfectas en racimos subterminales; sin embargo, cada flor
abre en dos momentos distintos y separados, es decir los órganos
femeninos y masculinos son funcionales en diferentes tiempos, lo que
evita la autofecundación.
En
ambos tipos, las flores abren primero como femeninas, cierran por un
período fijo y luego abren como masculinas en su segunda
apertura.
Esta
característica de las flores de aguacate es muy importante en una
plantación, ya que para que la producción sea la esperada es muy
conveniente mezclar variedades adaptadas a la misma altitud, con tipo
de floración A y B y con la misma época de floración en una
proporción 4:1, donde la mayor población será de la variedad
deseada.
2.
Fruto del aguacate:
No
se puede decir que el aguacate sea una fruta propiamente dicha, ya
que no tiene apenas dulzor y se suele tomar en ensaladas, como si
fuera una hortaliza.
Se
la ha definido por su riqueza en grasa como "la mantequilla
vegetal".
Composición
química del aguacate
-
Agua 70%
-
Proteínas 1,5%
-
Lípidos 22%
-
Hidratos de Carbono 6%
-
Vitamina A 40 microgramos/100 g
-
Vitamina B1 0,09 mg/100 g
-
Vitamina B2 0,12 mg/100 g
-
Vitamina B6 0,5 mg/100 g
-
Vitamina E (tocoferol) 3,2 mg/100 g
-
Vitamina C 17 mg/100 g
-
Potasio 400 mg/100 g
Este
fruto se caracteriza por un elevado porcentaje de grasa, por eso se
le denomina "mantequilla vegetal".
Es
muy energético y se desaconseja su uso al final de las comidas.
Su
grasa es una grasa saludable, vegetal, insaturada y sin
colesterol.
Se
puede consumir tanto crudo como cocido, empleándose más como una
hortaliza que como fruta.
Carece
de un sabor dulce o ácido característico, lo que permite su
combinación con muchos platos.
El
momento óptimo de su consumo viene marcado por la blandura de la
pulpa, cuando se puede untar como mantequilla.
3.
Clima:
La
raza antillana es poco resistente al frío, mientras que las
variedades de la raza guatemalteca son más resistentes y las
mejicanas las que presentan la mayor tolerancia al frío.
Sequías
prolongadas provocan la caída de las hojas, lo que reduce el
rendimiento; el exceso de precipitación durante la floración y la
fructificación, reduce la producción y provoca la caída del
fruto.
El
terreno destinado al cultivo debe contar con buena protección
natural contra el viento o en su ausencia, establecer una barrera
cortavientos preferentemente un año antes del establecimiento de la
plantación.
El
viento produce daño, rotura de ramas, caída del fruto,
especialmente cuando están pequeños.
También,
cuando el viento es muy seco durante la floración, reduce el número
de flores polinizadas y por consiguiente de frutos.
El
exceso de humedad relativa puede ocasionar el desarrollo de algas o
líquenes sobre el tallo, ramas y hojas o enfermedades fúngicas que
afectan el follaje, la floración, la polinización y el desarrollo
de los frutos.
Un
ambiente muy seco provoca la muerte del polen con efectos negativos
sobre la fecundación y con ello la formación de menor número de
frutos.
4.
Suelo:
Los
suelos más recomendados son los de textura ligera, profundos, bien
drenados con un pH neutro o ligeramente ácidos (5,5 a 7), pero puede
cultivarse en suelos arcillosos o franco arcillosos siempre que
exista un buen drenaje, pues el exceso de humedad propicia un medio
adecuado para el desarrollo de enfermedades de la raíz, fisiológicas
como la asfixia radical y fúngicas como fitoptora.
5.
Variedades de aguacate:
Las
variedades más conocidas en España son:
-
Gema
-
Bacon
-
Rincón
-
Ettinger (se cultiva en Israel, fruto verde muy resistente)
-
Fuerte (californiana, color verde punteado, madura en invierno, es la
variedad más extendida por todo el mundo)
-
Hass (californiana, fruto negro muy tardía).
En
otros países se cultivan:
-
Lula (color verde pálido, Florida)
-
Nabal (semilla pequeña, fruto grande, Mediterráneo)
-
Azteca
-
Puebla
-
Booth 7 y 8 (híbridos, Florida)
-
Zutano (mejicana, resiste al frío)
6.
Plantación:
Se
hacen hoyos con 60 cm de diámetro y 50 a 60 cm de profundidad.
Los
marcos de plantación, en general, las distancias varían entre 7 m x
9 m a 10 m x 12 m; el espaciamiento de 10 m entre plantas y 10 m
entre hileras, es el más empleado.
Existen
varios sistemas de plantación utilizados: el cuadrado que puede ser
8 x 8 con 156 plantas en una hectárea, 9 x 9 m con 123 plantas.Ha-1
o 10 x 10 con 100 plantas.Ha-1; el tresbolillo que puede ser 8 x 8
con 180 plantas.Ha-1, 9 x 9 con 142 plantas.Ha-1 y el 10 x 10 con 115
plantas.Ha-1.
No
es exigente en suelos, pero si en riegos, no soportando bien las
sequías.
7.
El suelo y las malezas:
Cuando
se realiza el control de malas hierbas, debe evitarse el empleo de
herramientas cortantes cerca de la base de los árboles, para no
provocar heridas que pueden ser la entrada para el hongo causante de
la marchitez del aguacate Phytophthora cinnamomi.
No
es recomendable mantener el suelo desnudo, ya que en estas
condiciones está sujeto a la erosión; es mejor tener un cultivo de
cobertura de plantas leguminosas entre los árboles, que por su
aporte de nitrógeno resultan las mejores, en muchos casos se
utilizan cubiertas de gramíneas de fácil manejo y poco
crecimiento.
El
manejo del acolchado de gramíneas puede hacerse con cortadora
rotativa antes que las malas hierbas de la cobertura entren en
floración.
Cuando
la cobertura de gramíneas se infesta de malas hierbas es conveniente
usar herbicidas en aplicaciones localizadas hacia éstas.
Lo
más recomendable es usar los herbicidas cuando las malas hierbas
rebrotan después de acolchar.
Si
tiene lugar la aparición de malas hierbas es conveniente aplicar un
buen herbicida como el Terbutizalina, dirigido a la maleza.
Para
especies de hoja ancha y ciperáceas se puede usar 2-4 D en su
formulación de sal, en dosis de 0,5 kg.Ha-1. Para malezas de difícil
erradicación, se utiliza glifosato.
8.
Fertilización en aguacate:
Estos
análisis indicarán si los niveles de nutrientes en el suelo y en la
planta son satisfactorios.
En
términos generales se pueden tomar como base para la fertilización
del aguacate las siguiente sugerencias:
Al
trasplante: 250 g de un fertilizante rico en fósforo como el de la
fórmula 10-30-10 o triple superfosfato, en el fondo del hoyo.
Por
cada año de edad del árbol, un kilo de un fertilizante rico en
nitrógeno y potasio como el de la fórmula 18-5-15-6-2, repartido en
tres aplicaciones, una a la entrada de las lluvias y las otras dos
cada dos meses.
La
cantidad máxima de fertilizante es de 12 kilos para árboles de 13
años en adelante. Esta cantidad se mantendrá si la producción es
constante. Si el análisis del suelo indica un pH bajo y un
porcentaje de aluminio intercambiable.
Cuando
el árbol entra en producción, la fertilización nitrogenada debe
incrementarse, ya que en el período comprendido entre el inicio de
la floración y la maduración del fruto, el árbol demanda la mayor
cantidad de nitrógeno.
Se
recomienda un kilogramo de urea adicional, a la dosis de la fórmula
completa, 40 días después de la floración, si hay riego; sino,
debe adicionarse en el inicio de la estación lluviosa.
Es
recomendable aplicar, por medio de fertilizantes foliares,
microelementos como: cobre, zinc, manganeso y boro una o dos veces al
año.
Los
fertilizantes suministrados como fórmulas completas se deben aplicar
en surcos u hoyos paralelos a la línea de plantación a 30 cm de
profundidad y a 20 cm del gotero del árbol.
Los
fertilizantes nitrogenados se depositan en hoyos de menor profundidad
o en la superficie distribuidos en círculo, en la zona de goteo del
árbol en círculo.
9.
Plagas del aguacate:
-
Taladrador del tronco (Copturomimus
persea)
-
Talador de la semilla del fruto Heilipus luari
-
Trip del aguacate (Heliothrips
haemorrhoidalis)
-
Arragres o abeja congo (Trigona
silvestrianun)
-
Perforador del fruto (Stenomema
catenifer)
-
Gusano arrollador de la hoja(Platynota spp.)
-
Arañitas rojas (Ácaros: Oligonychus
persea, Oligonychus yothersi, Tetranychus urticae -
Acaro de las agallas (Eriophyes sp.)
10.
Enfermedades del aguacate:
-
PUDRICIÓN DE LA RAÍZ O MARCHITEZ DEL AGUACATE (Phytophthora
cinnamomi)
-
MANCHA NEGRA O CERCOSPORA (Cercospora
purpura)
-
POLVILLO O MILDIU (Oidium sp.)
-
MANCHA NEGRA O ANTRACNOSIS (Colletotrichum
gloesporioides)
-
FUSARIOSIS
11.
Poda:
El
árbol de aguacate no requiere poda de formación. En los primeros
tres años de desarrollo, los árboles de aguacate requieren poca
atención en cuando a poda, pero luego se debe procurar mantenerlo
bien formado, de manera que las labores culturales y la cosecha se
faciliten.
Se
deben podar las ramas de crecimiento vertical con altura excesiva,
las ramas bajas o pegadas al suelo y los tallos débiles y
enfermos.
12.
Multiplicación del aguacate:
Se
multiplica por semillas y las variedades por injertos.
Es
posible también el estaquillado, aunque no suele utilizarse.
La
propagación por semilla no es recomendable para plantaciones
comerciales debido a la gran variabilidad que ocurre en producción y
calidad de fruto.
La
propagación por injerto es el método más apropiado para reproducir
las variedades seleccionadas para cultivo comercial, ya que los
árboles injertados son uniformes en cuanto a la calidad, forma y
tamaño de la fruta.
Las
semillas deben provenir de frutas sanas, de buen tamaño, cosechadas
directamente del árbol. Su viabilidad dura hasta tres semanas
después de extraída de la fruta.
Es
recomendable cortar la parte angosta de la semilla, en un tramo de
una cuarta parte del largo total, para ayudar así a la salida del
brote y para hacer una primera selección, ya que el corte permite
eliminar las semillas que no presenten el color natural blanco
amarillento, debido a podredumbre, lesiones o cualquier otro
daño.
Inmediatamente
después de cortadas, se siembran en el semillero previamente
preparado colocándolas sobre el extremo ancho y plano de modo que la
parte cortada quede hacia arriba.
Las
semillas empiezan a brotar aproximadamente treinta días después de
sembradas. Generalmente las plantas están listas para ser
trasplantadas al vivero, a los treinta días después de la
germinación.
Injerto
del aguacate:
Injerto
en T y de costado o de hendidura sobre plantas jóvenes de 6mmm
diámetro.
El
aguacate se puede injertar sobre:
-
Aguacate (Persea gratissima o Persea americana).
-
Viñátigo canario (Persea indica).
La
operación puede realizarse en el vivero o en el sitio definitivo de
plantación; sin embargo, lo recomendable es hacerla en el
vivero.
El
injerto de aguacate se realiza cuando el tallo de la planta patrón
tiene 1 cm de diámetro (aproximadamente 6 meses después de la
siembra) y a 10 cm de la base.
Debe
realizarse en un lugar fresco y aireado para lograr una buena unión
vascular entre el patrón y el injerto.
El
método más difundido para injertar el aguacate es el de unión
lateral aunque también da buenos resultados el injerto de púa
terminal; sin embargo, también se practican otros como el injerto de
escudete y el de hendidura, pero con menor éxito.
Las
púas a injertar deberán provenir de árboles seleccionados y
representativos de la variedad escogida, con buen vigor, sin
enfermedades, de buena producción y calidad.
Es
conveniente que las púas tengan diferentes grosores para contar con
material adaptable a los diferentes diámetros de los patrones.
El
injerto de unión lateral se realiza aproximadamente a los 20 cm de
altura del patrón.
Una
vez que el injerto ha pegado, entre los veintidós y treinta días
después de realizado, se empieza a eliminar la parte superior del
patrón. Esto se va haciendo paulatinamente hasta llegar al
injerto.
El
corte debe ser hecho a bisel y cubierto con una pasta funguicida a
base de cobre.
Cuando
el injerto tiene entre 20 y 25 cm de alto se puede trasplantar al
campo definitivo, siempre y cuando el corte haya sido cubierto por el
callo del injerto.
13.
Recolección:
A
los cinco años, generalmente se cosechan cincuenta frutos; a los
seis años, ciento cincuenta frutos; a los siete años, trescientos
frutos y ochocientos a los ocho años.
El
grado óptimo de madurez del fruto para realizar la recolección, es
difícil de determinar por la diversidad de variedades y ambientes,
por las variaciones en la duración de período de floración a
cosecha y por las diferencias en el contenido de aceites que se van
acumulando durante la maduración del fruto.